El investigador líder del grupo de investigación Wireless Networks consigue el reconocimiento de un estándar internacional
La Internet Engineering Task Force (IETF), órgano abierto que estandariza y regula los estándares de internet, ha publicado uno impulsado por Xavier Vilajosana, investigador líder del grupo de investigación Wireless Networks (WiNe). Este trabajo, llevado a cabo en los últimos cuatro años, estandariza el plan de control de las redes inalámbricas de bajo consumo energético de ámbito industrial. «Este estándar permite controlar las comunicaciones entre diferentes máquinas del sector industrial, es decir, su intercambio de datos. Por ejemplo, un dispositivo que controla un flujo de agua informa a otro para que lleve a cabo otra acción», explica Vilajosana. Hay más informació sobre esta noticia en este enlace.
Entrevistamos al investigador líder del grupo WiNe.
¿Cuál es tu formación académica?
Mi formación académica es Ingeniería Informática por la Universitat Politècnica de Catalunya, y soy doctor en Ciencia de la Computación por la UOC. El tema de mi tesis fue la gestión distribuida de contenidos en red y la forma en la que estos contenidos pueden asignarse tanto a usuarios como a proveedores o cómo pueden distribuirse desde los proveedores hasta los usuarios, usando modelos económicos.
¿Cuál es la actividad de investigación de tu grupo?
Mi grupo trabaja en sistemas de comunicación. Se llama Wireless Networks y, por lo tanto, trabajamos en redes de computadores, bastante centrados en redes de comunicación inalámbricas. Trabajamos en diferentes ámbitos dentro de las redes: desde el desarrollo de nuevos protocolos, la evaluación de tecnologías y la optimización de tecnologías ya existentes hasta la aplicación de estas tecnologías a diferentes verticales, diferentes aplicaciones, sobre todo en el ámbito de la industria.
¿Qué proyectos destacarías de tu investigación?
Últimamente, trabajamos con el sector de la automoción. Uno de los problemas que tiene este sector es la detección de si entra agua dentro de un vehículo. Una vez ha sido montado, tienen que saber si este vehículo es estanco o no y, por lo tanto, pasa un test en el que se le echa agua y, a posteriori, el personal de la empresa verifica de forma manual si ha entrado agua o no. Nosotros, con este requerimiento, hemos hecho el diseño de un sensor de coste muy bajo que detecta de forma automática si ha entrado agua y permite a los usuarios de la línea de producción, a los operarios, verificarlo. Los avisamos sin que tengan que entrar dentro del coche.
¿Qué destacarías de tus estancias internacionales con motivo de tu investigación?
Estuve en la Universidad de California, en Berkeley, desde finales de 2011 hasta 2014. Allí trabajé en un grupo de investigación, en un laboratorio que se llama Berkeley Sensor and Actuator Center, que pertenece al Departamento de Ingeniería Electrónica e Informática de la Universidad de California. Allá trabajamos en sistemas de comunicación industrial de bajo consumo energético, tanto en el desarrollo de un montón de protocolos estándar y de código abierto (open source), que todavía mantenemos y que es referente en la industria, como en la estandarización de esta tecnología. Fruto de este trabajo, creamos un grupo de trabajo de estandarización en la IETF —la Internet Engineering Task Force—, que es el organismo que regula los estándares de internet. Ahora, tras cinco años, estamos terminando las especificaciones de los estándares que empezamos a trabajar allí.
Algunos resultados de tu investigación han sido patentados: ¿hasta qué punto es importante esta protección?
Nosotros tenemos una vertiente de investigación bastante aplicada. Nos gusta poder transferir conocimiento a la industria, y entendemos que, como parte de un centro de investigación, uno de los mecanismos para poder hacer transferencia es, primero, protegerla, y después poder patentarla o cederla a la industria. Por lo tanto, cuando hacemos investigación más aplicada, intentamos ir a buscar la patente o el modelo de utilidad.
¿Qué obra recomendarías para entender mejor tu ámbito?
Nuestra investigación es muy técnica y las películas centrales en lo que nosotros hacemos tienen poco interés. Sí hay películas que presentan el contexto. Una de estas películas es The imitation game, sobre Alan Turing, que quería descifrar un código —un sistema de comunicaciones— empleado por el ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial. Nosotros trabajamos en cierto modo en este ámbito porque trabajamos en sistemas de comunicaciones. El sistema de comunicaciones que utilizaban los alemanes durante la guerra seguía un protocolo que Turing pudo descifrar: construyó una máquina que pudo descodificar esta señal. Nosotros trabajamos en el sentido contrario: creamos sistemas de comunicación que emplean los mismos principios que empleó la gente que sale en la película The imitation game. Y para los que nos gusta El señor de los anillos, tanto en las películas como en los libros salen dos artefactos que se llaman palantiri y que son como unas bolas que sirven para poner en contacto a personas que están en diferentes lugares. Nosotros trabajamos en los fundamentos de la comunicación de estas bolas, que, además, son inalámbricas. Seguramente, en El señor de los anillos no había ningún satélite que permitiera el enlace de una con la otra. Por lo tanto, allí dentro hay alguna tecnología que sería del interés de mi grupo.