27/8/21 · Salud

Los profesionales de la salud prevén seguir usando la consulta electrónica tras la pandemia

La implantación de la eConsulta en Cataluña se ha ido extendiendo a toda la red de atención primaria y más del 92 % de los equipos asistenciales han utilizado esta herramienta

Los beneficios de su uso durante la pandemia y la presión del entorno, entre los principales determinantes para su adopción en el futuro

La práctica profesional de la salud electrónica y la telemedicina suponen cambios importantes en las tareas que llevan a cabo los profesionales
La implantación de la eConsulta en Cataluña se ha ido extendiendo a toda la red de atención primaria y más del 92 % de los equipos asistenciales han utilizado esta herramienta (foto: Tima Miroshnichenko, Pexels)

La implantación de la eConsulta en Cataluña se ha ido extendiendo a toda la red de atención primaria y más del 92 % de los equipos asistenciales han utilizado esta herramienta (foto: Tima Miroshnichenko, Pexels)

En 2015, como parte de la carpeta personal de salud conocida como La Meva Salut, se incluyó la eConsulta para todos los habitantes de Cataluña y sus profesionales de atención primaria. Un estudio llevado a cabo por la Universitat Oberta de Catalunya y el Instituto Catalán de la Salud (ICS), de la Generalitat de Cataluña, revela la buena predisposición de los profesionales a continuar usando este servicio en un contexto pos-COVID-19. En el análisis, publicado con acceso abierto en el Journal of Medical Internet Research, el equipo investigador valora la implementación del sistema entre personal sanitario y personas usuarias, así como la utilidad que tiene hoy en día.

La importancia de la eConsulta durante la pandemia

La eConsulta es una herramienta de teleconsulta asincrónica, es decir, una herramienta de comunicación digital que no requiere presencialidad ni coincidencia en el tiempo. Permite a la ciudadanía enviar consultas en cualquier momento y desde cualquier dispositivo a su médico o médica de cabecera o a su enfermero o enfermera de atención primaria y recibir respuesta en un plazo máximo de 48 horas en días laborables. La herramienta permite enviar archivos adjuntos, como fotografías y otros documentos, que se pueden incorporar a la historia clínica del paciente por decisión del profesional sanitario.

Aunque la eConsulta complementa la atención presencial, su uso ha aumentado de manera muy significativa durante la pandemia, y ha facilitado la respuesta a la alta presión del sistema de salud. «La telemedicina se ha convertido en una práctica clínica necesaria, tanto para brindar atención a los pacientes con COVID-19 de forma segura como para seguir atendiendo las consultas rutinarias de atención primaria», explica Francesc Saigí, investigador del grupo de investigación interdisciplinaria sobre las TIC (i2TIC), profesor de los Estudios de Ciencias de la Salud y colaborador del eHealth Center de la Universitat Oberta de Catalunya.

La implantación de la eConsulta se ha ido extendiendo a toda la red de atención primaria y más del 92 % de los equipos han utilizado la herramienta. «Recientemente se ha empezado a introducir en hospitales públicos», añade Saigí. Esto indica que la pandemia ha fomentado su implementación, ya que su crecimiento comenzó al mismo tiempo que se adoptaban las medidas y restricciones asociadas a la COVID-19. «A pesar de que su tasa de uso hasta marzo del 2020 era baja en comparación con la consulta presencial, con solo el 0,9 % del total, la pandemia de la COVID-19 ha favorecido y está favoreciendo su implementación con una velocidad y un impacto sin precedentes, y se ha llegado a triplicar su uso», asegura el investigador.

La principal conclusión del estudio es que la mayoría de los profesionales asistenciales están satisfechos con su uso y planean incorporar la herramienta en sus prácticas más allá de la pandemia. Los beneficios percibidos, junto con la presión del entorno, son determinantes en la actitud y la intención de utilizar la eConsulta, observa el personal investigador. Sin embargo, también detecta algunas resistencias a la utilización persistente de la herramienta tras la pandemia, especialmente entre algunos colectivos, como el de enfermería. Aun así, la experiencia positiva entre el personal médico y de enfermería aumenta la probabilidad de que continúen utilizándola después de la pandemia. «Vale la pena aprovechar el impulso que nos brinda la crisis actual para implementar al menos algunas de las soluciones propuestas en la literatura científica», dice Saigí.

¿Cómo han empleado los profesionales sanitarios la eConsulta durante este tiempo?

Para que la telemedicina se asiente en la atención sanitaria rutinaria, tiene que haber una aceptación de los usuarios y de los profesionales sanitarios. Diferentes factores pueden explicar por qué un colectivo adopta, en mayor o menor grado, una herramienta tecnológica concreta. De estos, los factores sociales se perciben como los más complejos. «Nuestra investigación confirma que la percepción de utilidad se configura como el factor explicativo que tiene más incidencia sobre la predisposición de usar la eConsulta», dice Saigí. «En concreto», continúa, «los profesionales asistenciales del Instituto Catalán de la Salud (ICS) dan relevancia, por un lado, a cómo han mejorado tanto la relación con los pacientes como la eficiencia de su actividad a la hora de valorar su intención de usar la herramienta, y, por otro lado, a los beneficios percibidos ante la intención de usarla después de la COVID-19».

Según describe, a estas dos percepciones les seguiría en importancia, en la intención de seguir usando la eConsulta después de la COVID-19, la presión del entorno que, de manera directa o indirecta, compañeros de trabajo, pacientes o la propia institución ejercen sobre el profesional. «Encontramos que el hecho de que los pacientes tengan un fácil acceso a la herramienta hace que soliciten al profesional usarla. Asimismo, el hecho de que algunos compañeros valoren positivamente la herramienta o la usen directamente también influye sobre la intención de uso. Finalmente, el hecho de que la propia institución sanitaria apueste por la implantación de la eConsulta constituye una razón importante para adoptarla».

Otra variable a favor es la facilidad de uso percibida en su implantación. «Esto también respalda un impacto positivo en la actitud a la hora de usar la herramienta. En concreto, algunos profesionales mejoran su actitud y su intención de utilizar la eConsulta al creer que no implicará ningún esfuerzo, especialmente en el colectivo de médicos», comenta el investigador. De acuerdo con estudios previos, el personal médico de cabecera con experiencia previa con otras tecnologías sanitarias digitales se muestra más entusiasta y optimista que aquellos que aún no las han utilizado. «Pero conviene destacar el bajo peso que tiene este factor frente a los beneficios obtenidos y la presión del entorno», observa.

Esto podría deberse bien a la implantación generalizada que la Administración está realizando de la herramienta o bien a la transformación digital acelerada que ha vivido el sector sanitario a raíz de la COVID-19, apunta Saigí. «En cualquier caso, la experiencia de usar herramientas tecnológicas se configura también como una variable que muestra relación directa y significativa sobre la intención de usar la eConsulta después de la COVID-19. Y este resultado indica la importancia de desarrollar competencias del personal para adoptar soluciones digitales en salud sostenibles».

La eConsulta y el camino hacia el futuro de la telemedicina

La implementación de la telemedicina todavía tiene un largo camino que recorrer, aunque su presencia se haya normalizado hasta cierto punto. La práctica profesional de la salud electrónica y la telemedicina supone cambios importantes en las tareas que deben llevar a cabo los profesionales. De ahí la necesidad de una literatura científica más profusa y profunda en este ámbito. «Los resultados de este estudio son críticos para las personas que planifican las políticas de salud digital, ya que el éxito de la herramienta dependerá en gran medida de si el personal sanitario la promueve», afirma. Según el investigador, para una implantación duradera de la eConsulta, las tareas que realizan los colectivos médicos y de enfermería deberían revisarse para que su prestación de valor sea más eficiente y de calidad.

Entre los principales retos a los que se enfrenta la eConsulta se encuentra la demanda de los pacientes. «De poco sirve tener a los colectivos profesionales activos y preparados para la transformación digital si desde la demanda de atención de servicios se sigue optando preferentemente por la atención presencial. Por eso es importante continuar avanzando en la difusión social basada en los puntos fuertes de estas herramientas de atención digital, al tiempo que se trabaja por la reducción de sus debilidades, especialmente las desigualdades de atención que su uso pueda generar», explica.

Recomendaciones para un sistema de eConsulta «perfecto»

«Para alcanzar un sistema de eConsulta perfecto», comenta Saigí, «se deberían modificar, en primer lugar, las tareas que deben llevar a cabo los profesionales para añadir más valor a su uso. En segundo lugar, los pacientes tendrían que impulsar la demanda digital de atención. Y, finalmente, habría que establecer relaciones de complementariedad entre los usos, las tareas y la demanda de los pacientes». Por suerte, parece que ya hemos comenzado a recorrer el camino hacia una salud digital más común en la sociedad. «Sin duda», afirma el experto, «la normalización de la eConsulta tendrá importantes beneficios en el sistema sanitario. De acuerdo con la literatura, la adopción y el uso de la telemedicina están ligados a la eficiencia y la competitividad, y permiten hacer frente a los retos que los cambios socioeconómicos plantean a los sistemas sanitarios».

Entre dichas demandas encontramos la atención sanitaria, el envejecimiento de la población, el aumento de la movilidad de la ciudadanía, la necesidad de gestionar grandes cantidades de información y la provisión de una mejor atención sanitaria. En opinión de Saigí, «todo ello en un entorno de limitaciones presupuestarias y contención del gasto». Varios estudios señalan, además, que la atención telemática reduce las visitas presenciales de bajo valor añadido, demostrando así la eficiencia de la intervención desde la óptica del proveedor sanitario. Esto indica, también, que la telemedicina permite centrar la atención presencial en los pacientes que requieran contacto físico y descarta el desgaste de recursos innecesarios, lo que supone un valor añadido a la implementación de la eConsulta. «Permitiría reducir las listas de espera y optimizar los servicios asistenciales. Serían, en definitiva, beneficios derivados del empoderamiento de la parte de la población que hace un uso activo de la eConsulta», concluye.

La UOC apuesta por el eje estratégico en salud digital. Como parte de esta iniciativa, ha creado el eHealth Center, un centro de investigación que tiene la misión de impulsar la investigación interdisciplinaria y transversal en salud digital.

Esta investigación de la UOC favorece el objetivo de desarrollo sostenible (ODS) 3, garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.

 

Artículo de referencia:

Saigí-Rubió, F., Vidal-Alaball, J., Torrent-Sellens, J., Jiménez-Zarco, A., López Segui, F., Carrasco Hernandez, M., Alzaga Reig, X., Bonet Simó, J., M., Abizanda González, M., Piera-Jimenez, J., Solans, O. (2021). Determinants of Catalan Public Primary Care Professionals' Intention to Use Digital Clinical Consultations (eConsulta) in the Post-COVID-19 Context: Mixed Methods Study. Journal of Medical Internet Research, 23,(6), 28944. https://doi.org/10.2196/28944

UOC R&I

La investigación e innovación (RI) de la UOC contribuye a solucionar los retos a los que se enfrentan las sociedades globales del siglo xxi, mediante el estudio de la interacción de la tecnología y las ciencias humanas y sociales, con un foco específico en la sociedad red, el aprendizaje en línea y la salud digital. Los más de 500 investigadores y 51 grupos de investigación se articulan en torno a los siete estudios de la UOC y dos centros de investigación: el Internet Interdisciplinary Institute (IN3) y el eHealth Center (EHC).

Los objetivos de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y el conocimiento abierto son ejes estratégicos de la docencia, la investigación y la innovación de la UOC. Más información: research.uoc.edu. #25añosUOC

Expertos UOC

Contacto de prensa

También te puede interesar

Más leídos

Ver más sobre Salud