Alumni
Licenciada en Humanidades
Estela Mariné Roig, doctora en Turismo, profesora y ganadora de la Medalla del Turismo de Cataluña 2018
«Hay que hacer ver a algunos residentes de Barcelona descontentos que los visitantes no son enemigos»
¿Cuál era el tema de tu proyecto ganador de la Medalla del Turismo?
El proyecto analiza las tres fuentes de información (autónomas, orgánicas e inducidas) que contribuyen a la construcción de la imagen y la identidad de un destino turístico, en este caso de Cataluña. Primero, analizamos guías de viaje sobre la costa catalana, publicadas en francés y alemán durante más de cien años. Después, estudiamos macrodatos a partir de contenido generado por los visitantes y por los gestores oficiales del destino. Finalmente, medimos el contraste entre las tres fuentes.
«Es como un sueño haber recibido el máximo galardón en materia de turismo de Cataluña»
¿Qué ha significado este reconocimiento para ti?
¡Me llamaron de la Generalitat para comunicarme que había ganado la Medalla y no me lo podía creer! Cuando inicié el itinerario de investigación, con la guía de mi mentor, el Dr. Salvador Anton Clavé, catedrático de la URV, no podía imaginar que llegaría tan lejos. Para un investigador, es como un sueño haber recibido el máximo galardón en materia de turismo de Cataluña.
¿Cómo transforman las tecnologías el sector turístico?
Las TIC, en paralelo con los medios de comunicación social, han facilitado el crecimiento espectacular de los contenidos en línea generados por los usuarios (UGC). En el campo del turismo, primero fueron los blogs de viaje y después, las reseñas de viaje. Por ejemplo, TripAdvisor alojaba 10 millones de opiniones de turistas en 2008 y ahora tiene más de 700 millones. Además del fenómeno del UGC, las nuevas tecnologías, como la geolocalización, los códigos QR, las aplicaciones móviles, la realidad virtual o la realidad aumentada, han revolucionado el sector. La intermediación también se ha visto afectada con la aparición de buscadores especializados en encontrar las mejores ofertas de viajes y alojamientos, y también de portales que facilitan la reserva en línea.
¿Está preparado el sector para sacar partido a los datos generados por millones de turistas?
El sector evoluciona porque antes tenían que averiguarse las opiniones y las expectativas de los turistas a partir de unos centenares de encuestas y ahora disponemos de centenares de miles de opiniones de visitantes, espontáneas y de libre acceso en internet. Pero una parte de los blogs y las reseñas de viaje es información no estructurada. El reto está en avanzar en el análisis textual informatizado de experiencias, opiniones y sentimientos. Por suerte, el hardware y el software han mejorado mucho en los últimos años. Por ejemplo, nosotros conseguimos analizar 25.000 opiniones en 2013 y, al final del mes de enero, presentaremos una investigación en el congreso internacional ENTER 2019 en la que analizamos un millón de opiniones escritas en inglés.
En Barcelona, por ejemplo, ¿cuáles son los temas más importantes para los turistas que utilizan las redes sociales?
La obra del arquitecto Antoni Gaudí es el tema más popular. También aparecen en los primeros lugares de la clasificación el Barri Gòtic y el campo del Barça. Ahora bien, la primera posición siempre ha sido para la basílica de la Sagrada Familia, muy especialmente para los turistas procedentes de ultramar, como los estadounidenses, australianos, canadienses o japoneses.
¿Qué nacionalidades son más críticas?
La inmensa mayoría de los comentarios sobre Barcelona son muy positivos. La obra de Gaudí y las empresas barcelonesas dedicadas a organizar recorridos turísticos o visitas guiadas obtienen las puntuaciones más elevadas. En cuanto a las nacionalidades, hemos detectado que los extranjeros, y especialmente los estadounidenses, dan calificaciones más altas que los españoles. Las quejas más destacadas son sobre las colas y aglomeraciones en los «puntos calientes», como, por ejemplo, las visitas a la Sagrada Familia.
¿Dónde podría mejorarse todavía?
Hay que hacer ver a algunos residentes descontentos que los visitantes no son enemigos. No olvidaré que, en un viaje autoorganizado en Japón, quedamos maravillados por la gran amabilidad de los residentes para orientarnos y resolver nuestros problemas a pesar de las dificultades del idioma. Ahora bien, esto no impide que los gestores del destino tengan que poner en marcha políticas para minimizar las molestias a los vecinos.
¿Qué es lo que más valoras de tu tarea docente?
Lo que más me satisface es ver cómo prosperan los alumnos hasta merecer unas calificaciones excelentes. Por ejemplo, la primera entrega de un TFM acostumbra a ser flojita, aunque el alumno tenga un objetivo bastante interesante. A partir de recomendaciones y sugerencias, el trabajo mejora en las siguientes entregas hasta llegar a un nivel que permite defender el TFM de forma satisfactoria ante la comisión evaluadora.
¿Es fácil compaginarla con la investigación?
No es fácil, pero la docencia y la investigación tienen muchos puntos en común. La preparación de la docencia permite adquirir nuevos conocimientos que son aplicables a la investigación y viceversa. Lo que más me gusta es la docencia y lo que más me cuesta son las tareas de gestión, pero comprendo que son necesarias.
Como profesora colaboradora, ¿qué consejo das a tus estudiantes que tienen que hacer el TFM de Turismo Sostenible y TIC?
Antes que nada, tienen que mentalizarse de que el TFM no es una asignatura más. Se trata de hacer una aportación significativa en el campo del turismo sostenible y las TIC y, por lo tanto, requiere una gran dedicación. Por otra parte, siendo como es un documento científico, tiene que seguir los estándares internacionales de las publicaciones científicas sobre contenido, estructura y formato.