Estudiantes con necesidades educativas especiales de distintas universidades europeas destacan los beneficios de los sistemas de evaluación electrónica

El proceso de digitalización trae consigo oportunidades y presenta varios retos para las instituciones de educación superior. Uno de los retos esenciales es la autenticación de los alumnos en la educación en línea. La utilización de los entornos de aprendizaje digitales (EAD) está aumentando progresivamente en la enseñanza superior, y los sistemas de evaluación electrónica son cada vez más importantes en la era digital, tanto para las instituciones académicas como para los estudiantes, incluidos los estudiantes con necesidades educativas especiales y discapacidades (SEND, por su sigla en inglés).

David Bañeres, investigador del grupo SOM Research Lab del Internet Interdisciplinary Institute (IN3) de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y profesor de los Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la misma universidad, con el objetivo de explorar las necesidades de este colectivo, las ha analizado en un estudio —publicado en acceso abierto en la revista International Journal of Educational Technology in Higher Education (ETHE)— realizado en colaboración con investigadores de Finlandia, Turquía y Reino Unido. «Este estudio surge porque una de las ventajas del sistema TeSLA, ideado por la UOC —un sistema de autenticación conocido como sistema de evaluación electrónica adaptable basado en la confianza para el aprendizaje—, es facilitar el acceso a la evaluación virtual a estudiantes con diversidad funcional.»

Los investigadores han analizado las percepciones y opiniones de este grupo de estudiantes en algunas de las universidades que han participado en el proyecto europeo TeSLA (Adaptive Trust-based e-assessment System for Learning): la Universidad de Jyväskylä (Finlandia), la Open University (Reino Unido) y la Universidad de Anadolu (Turquía). Bañeres explica que «se han analizado tanto las percepciones de los estudiantes con alguna discapacidad o con necesidades especiales frente a un sistema de autenticación y validación de autoría, como la compartición de datos personales biométricos, ya que para algunos estudiantes pueden ser datos muy sensibles que pueden estar relacionados con su necesidad especial o discapacidad».

El estudio se desarrolla en el marco de una legislación relacionada con la educación en línea y los servicios en línea. En la Unión Europea ha entrado en vigor una nueva legislación sobre la privacidad y la transferencia de datos (Reglamento General de Protección de Datos, RGPD) y sobre accesibilidad (Directiva [UE] 2016/2102), que ha aumentado la concienciación sobre estas cuestiones entre los usuarios finales (Comisión Europea, 2016; Voigt y Bussche, 2017).

Autenticación electrónica para estudiantes con diversidad funcional

La digitalización es, sin duda, una de las soluciones clave para los desafíos actuales: añade flexibilidad a los estudios de educación superior y permite el acceso a todos los estudiantes, independientemente de sus discapacidades o necesidades especiales, situación personal, ubicación geográfica, circunstancia local o contexto global excepcional, como, por ejemplo, la pandemia de la COVID-19.

En el proceso de identificación, el usuario suele proporcionar información como su nombre, su ID de usuario o su dirección de correo electrónico; mientras que la autenticación requiere información privada y secreta, como una contraseña. En general, tanto la información no privada como la privada de los usuarios pueden verse comprometidas de diversas maneras, y pueden poner en peligro la identificación y la autenticación de los usuarios. La confianza es una condición previa fundamental para el éxito de cualquier nueva tecnología, especialmente en la educación, y la confianza en la autenticación electrónica parece ser compleja.

¿En qué medida los estudiantes consideran aceptable compartir datos personales para la autenticación electrónica? ¿Influyen variables de contexto de los estudiantes con SEND, como, por ejemplo, el tipo de discapacidad, el género, la edad, el nivel educativo, etc., a la hora de aceptar compartir datos personales para la autenticación electrónica? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de utilizar la autenticación electrónica en la evaluación electrónica según los estudiantes con necesidades educativas especiales?

Factores cruciales para la aceptación del sistema

Las respuestas constatan que la discapacidad o necesidad especial no es la variable que determina la opinión del estudiante frente a un sistema de autenticación como el TeSLA. En él se demuestra que factores como la edad y el género o las experiencias previas tienen un mayor impacto en la aceptabilidad del uso del sistema. Tras analizar los resultados, los investigadores han observado que hay tres factores cruciales para aceptar la utilización del sistema: el grado de conocimiento de la tecnología por parte del estudiante, el trabajo adicional que comporta utilizar el sistema y el nivel de intrusión que sufren los estudiantes.

Los resultados del estudio son de especial interés para los académicos o investigadores que trabajan para facilitar el acceso a los alumnos con diversidad funcional en la evaluación en línea. Tal como apunta Bañeres, «el estudio permite conocer sus percepciones para decidir qué sistema es el más apropiado en estos casos y qué herramientas de autenticación y detección de autoría están dispuestos a utilizar. Asimismo, permite conocer cuál es su percepción sobre compartir datos de carácter personal».

Para estudiar los puntos de vista de los estudiantes con necesidades educativas especiales sobre la autenticación electrónica en la educación, hay que mantener la confianza de los estudiantes al implantar las nuevas tecnologías. Es necesario atender a las dudas y requerimientos de los estudiantes con diversidad funcional para evitar que la autenticación electrónica se convierta en una barrera para sus estudios.

Este estudio favorece los siguientes objetivos de desarrollo sostenible (ODS): 4, educación de calidad; 9, industria, innovación e infraestructura, y 10, reducción de las desigualdades.

 

Artículo de referencia

Laamanen, M., Ladonlahti, T., Uotinen, S. et al. Acceptability of the e-authentication in higher education studies: views of students with special educational needs and disabilities. Int J Educ Technol High Educ 18, 4 (2021). https://doi.org/10.1186/s41239-020-00236-9

El estudio ha recibido financiación de la Comisión Europea H2020-ICT-2015/H2020-ICT-2015, Number 688520.

 

Información complementaria al proyecto TeSLA de la UOC

La UOC ha liderado el proyecto europeo de innovación e investigación TeSLA, que ha tenido como objetivo definir y desarrollar un sistema de evaluación en línea (e-assessment) que autentique a los estudiantes e identifique la autoría de las actividades de aprendizaje (exámenes, ejercicios, etc.) en entornos de aprendizaje en línea.

El consorcio TeSLA lo han formado 18 organizaciones expertas, entre las cuales hay 8 universidades europeas, 3 agencias de evaluación de la calidad universitaria (Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Cataluña —España—, European Association for Quality Assurance in Higher Education AISBL —Bélgica— y European Quality Assurance Network for Informatics Education EV —Alemania—), 4 centros de investigación internacionales (Universidad de Namur —Bélgica—, Instituto Nacional de Astrofísica Óptica y Electrónica —México—, Fundación del Instituto de Investigación IDIAP —Suiza— e Imperial College London —Reino Unido—) y 3 empresas tecnológicas (Protos Sistemas de Información —España—, LPLUS GmbH Company —Alemania— y Watchful —Portugal—).

TeSLA lo ha conformado en total un equipo de unos 80 profesionales con la participación de más de 14.000 estudiantes de Europa.

UOC R&I

La investigación e innovación (I+i) de la UOC contribuye a solucionar los retos a los que se enfrentan las sociedades globales del siglo xxi mediante el estudio de la interacción de la tecnología con las ciencias humanas y sociales, con un foco específico en la sociedad red, el aprendizaje en línea y la salud digital. Los más de 500 investigadores y 51 grupos de investigación se articulan en torno a los siete estudios de la UOC y dos centros de investigación: el Internet Interdisciplinary Institute (IN3) y el eHealth Center (eHC).

Los objetivos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas y el conocimiento abierto son ejes estratégicos de la docencia, la investigación y la innovación de la UOC. Más información: research.uoc.edu. #25añosUOC