¿Deben ir de la mano la cultura y la educación en las calles de nuestros barrios? ¿Deben las instituciones culturales tener un compromiso firme con el entorno que habitan? ¿Deben implicarse las escuelas en los cambios y conflictos del paradigma digital? Estas solo son tres preguntas de una docena de ellas que podríamos formular relacionadas con los retos de la realidad contemporánea ligados a la educación, la ciudad y la cultura.
El proyecto «Escuela en residencia» es un dispositivo que aborda dichas preguntas, las desborda y tiende puentes que no imaginamos desde nuestra silla estable de docentes o agentes culturales.
25 sesiones de 3 horas, entre los meses de septiembre y diciembre del pasado año, fueron el marco del proyecto «Escuela en Residencia», un programa permanente del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) que abre un espacio de experimentación y aprendizaje sobre cómo romper las fronteras entre educación y cultura. Todas las sesiones se han llevado a cabo en las instalaciones del CCCB. No son actividades complementarias al currículum de la escuela; están integradas en su horario lectivo.
A decir de las instituciones participantes: «‘Escuela en residencia’ es, en el sentido más pleno de la palabra, un proyecto de vecindad entre el Instituto Miquel Tarradell y el CCCB en el barrio del Raval de Barcelona. Durante todo el curso escolar, las dos instituciones construyen juntas un proyecto educativo y comunitario que conecta los aprendizajes de los jóvenes con los grandes debates del mundo contemporáneo a través de las líneas de trabajo, los recursos y la red de creadores, pensadores y productores culturales del CCCB.»
Diseño del programa educativo
He sido el encargado del diseño del programa educativo para este curso de otoño. El tema para articular la temática de las sesiones ha sido internet, desde una visión crítica. Al programa lo denominamos #UniversInternet, dando seguimiento a varios años de trabajo con el departamento de Educación del CCCB y con el CCCBLab.
Las temáticas de las sesiones se articulaban en los temas centrales de los debates actuales de internet:
1. Tejer la red.
2. Tejer sin tecnología.
3. Taller de #hashtags.
4. Taller de emojis faciales.
5. Manual de autodefensa en línea.
6.La música e internet.
7. La privacidad y nuestros datos.
8. El futuro de internet.
9. Entornos virtuales de futuro.
10. Radio y pódcast en internet.
11. Arte digital y la red.
Taller «Entornos virtuales de futuro»
Fuente: CCCB
En los cuatro meses de trabajo se invitó a una docena de expertas en los diversos ámbitos que han ayudado a ampliar la perspectiva del programa educativo:
- Pia Capisano, activista dinamizadora de comunidades.
- Irma Marco, artista investigadora.
- Ginebra Vall, actriz y productora audiovisual.
- Thais Ruiz de Alda, activista tecnofeminista.
- Bikoko, cantante.
- Victoria Fenoll, mánager musical.
- Antònia Folguera, comisaria de Sònar+D.
- Elisabeth Roselló, especialista de futuros.
- Grup Mediaccions UOC, grupo de investigación académico.
- Xarxa de Ràdios Comunitàries de Barcelona (XRCB).
- Aurora Gasull, artista digital.
El Raval como puente
En este proyecto el barrio del Raval se convierte en el
Sesión «La música e Internet» con la cantante Bikôkô
Fuente: CCCB
La experiencia genera, por un lado, un recorrido de temáticas que oscilan entre la visión crítica de internet y la visualización de sus problemáticas globales. Por otro lado, se trabaja con dinámicas diversas para imaginar el futuro de internet desde los ojos de la juventud, que es la que finalmente vivirá en la red de redes. ¿Cómo se entretejen estos aprendizajes con su currículum escolar?, ¿cuál es el impacto de internet en la formación de la identidad del estudiantado?, ¿qué rol deben jugar las instituciones educativas en estos debates?, ¿cuál es la obligación de las instituciones culturales en los barrios que habitan?
Recién finalizadas las sesiones del curso, muchas experiencias vividas no son medibles con indicadores académicos. Tampoco en los indicadores de las instituciones culturales. Lo que puedo concluir, siendo vecino del Raval (el entorno donde se ha llevado a cabo el proyecto) y después de haber dedicado 75 horas de docencia, es que el estudiantado ha invadido la institución cultural y se ha identificado con ella.
Equipamientos culturales e identidad de barrio
Si a los 16 años un grupo de estudiantes se reconocen, en alguna medida, con el museo o centro cultural que tienen en su barrio, ya no hay marcha atrás. Lo llegarán a considerar suyo y lo identificarán como un espacio al que pertenecen, del que pueden aprender y por el que deben luchar. La idea de barrio debe integrar equipamientos culturales públicos para completar su identidad y estos deben conectar con las escuelas y las problemáticas inmediatas de su entorno. El riesgo de no hacerlo puede llevar a las instituciones a convertirse en entidades generadoras de desigualdades, a un alejamiento de su tejido local y, lo peor de todo, a que dicho centro cultural se visualice como un marcador de clase social, algo que se les atribuye a muchas prácticas intelectuales de las ciudades que habitamos. En este punto, solo le quedará a la juventud ir a hacer skateboard, bailar trap o hacer botellón en los alrededores de esos edificios majestuosos que los miran de espaldas.
Alumnado del Instituto Miquel Tarradell
Fuente: CCCB
Citación recomendada
FOGLIA, Efraín. La escuela, el Raval e internet. COMeIN [en línea], enero 2022, no. 117. ISSN: 1696-3296. DOI: https://doi.org/10.7238/c.n117.2206
Profesor de Diseño en la UOC
@EfrainFoglia