En países como Kenia y Ecuador el aborto es un tema de vida o muerte para muchas mujeres que atraviesan embarazos no deseados. Kenia tiene la tasa más alta de África de mortalidad por aborto inseguro; alrededor de 6.000 mujeres mueren cada año por causas relacionadas con el aborto. Así mismo, en Ecuador el aborto inseguro es una de las principales causas de muerte materna; en 2018 al menos 18 mujeres murieron por causas relacionadas con abortos inseguros (FLACSO, 2019).
Es importante señalar aquí que, en los países donde el aborto es legal, las muertes de mujeres relacionadas con complicaciones por aborto son casi inexistentes. El aborto desde una perspectiva biomédica como tal no es un procedimiento complejo, lo que lo convierte en riesgoso es el contexto de clandestinidad e inseguridad que lo rodea en países donde su acceso es restringido.
En ambos países el aborto se permite en ciertos casos; sin embargo, esto no es suficiente para que las mujeres que quieren interrumpir su embarazo puedan hacerlo de forma segura. La matriz judeocristiana en el caso ecuatoriano, sumada a una idea del deber femenino fuertemente relacionado con la maternidad (Cevallos Castells, 2012), convierte al aborto en algo más que un procedimiento médico. Así mismo, la historia reciente de independencia en Kenia (1963) ha construido un discurso sobre las mujeres ligado a la importancia de parir y cuidar, para poblar la naciente república (Schylter, 2019). El aborto, en ambos casos, se convierte en un asunto que va en contra del supuesto deber femenino. Se vuelve, así, un tema culturalmente estigmatizado y criminalizado en ambos países. En este sentido, más allá de las permisiones o restricciones legales, existen normas morales o culturales que complican el acceso a un aborto seguro.
Para las mujeres en estos contextos el aborto se convierte en un espacio de disputa encarnado en sus propios cuerpos, donde el Estado, con las leyes, y la cultura y las respectivas normas sociales pretenden normar, castigar y limitar las decisiones personales. En este marco, y tomando en cuenta que en ambos países hay causas bastante amplias que deberían ser suficientes para acceder a un aborto seguro, parecería que son los discursos estigmatizantes que rodean al aborto los que definitivamente lo convierten en algo inaccesible.
Frente a esto, movimientos feministas se han apropiado de redes sociales como Facebook y Youtube para construir nuevos discursos que permitan entender el aborto como una decisión personal, sin una carga estigmatizante que deriva de la supuesta obligación de ser madres. Para estas feministas, el uso de redes sociales se ha convertido en una estrategia de resistencia y en la posibilidad de brindar información segura a quienes necesitan acceder a un aborto.
Por un lado, se construyen nuevos discursos en los que el aborto se presenta como una opción y no como un atentado. Es importante señalar que en ellos, además, se desdibuja la ilegalidad al poner en conocimiento de las mujeres las causales legales en ambos países. Por otro lado, se activan redes sociales de apoyo entre las mismas mujeres, quienes se acompañan y comparten sus experiencias y, por supuesto, la información necesaria para tener abortos seguros.
Las feministas del sur se están apropiando del ciberespacio, para hilar nuevos discursos y tejer lazos más allá del mismo espacio virtual, lo que en el caso del aborto está también salvando la vida de muchas mujeres.
Para saber más:
Arai, L. (2012). «Teenage Pregnancy as a Social Threat: A South African Perspective». Sex Roles: A Journal of Research, vol. 66(7-8), pp. 565-567. https://doi.org/10.1007/s11199-011-0091-5
Arcos Herrera, C. (2018). «Feminismos latinoamericanos: deseo, cuerpo y biopolítica de lo materno». Debate Feminista, n.o 55, pp. 27-58. https://doi.org/10.22201/cieg.01889478p.2018.55.02
Castro, R. (2010). «Las redes sociales en la experiencia del aborto: un estudio de caso con mujeres de Cuernavaca (México)». Estudios Sociológicos, vol. 21(3), pp.557-584, 2003.
Cevallos Castells, M. R. (2012). El temor encarnado, aborto en condiciones de riesgo en Quito. Quito: FLACSO Ecuador.
González Prado, P. (2020). «Jurisprudencia comparada sobre aborto: cuando los feminismos impregnan el derecho». Cuadernos Electrónicos de Filosofía del Derecho, n.o 42, pp. 135-157. http://dx.doi.org/10.7203/CEFD.42.16026
Kole, E. S. (2001) «Appropriate Theorizing about African Women and the Internet». International Feminist Journal of Politics, vol. 3(2), pp. 155-179. https://doi.org/10.1080/14616740110053047
Macleod, C. (2011). ‘Adolescence’, pregnancy and abortion: Constructing a threat of degeneration. Nueva York y East Sussex: Routledge. ISBN 978-0-415-55338-4.
Rivoir, A. L.; Morales, M. J. (2019). Tecnologías digitales : Miradas críticas de la apropiación en América Latina. Buenos Aires: CLACSO. https://doi.org/10.2307/j.ctvt6rmh6
Schlyter, A. (2019). «Body Politicis and the Crafting of Citizenship in Peri-Urban Luzaka». Feminist Africa, 13, pp. 23-43. http://www.agi.ac.za/sites/default/files/image_tool/images/429/feminist_africa_journals/archive/13/fa13_feature_schlyter.pdf
Tribe, L. H. (2013). El aborto: guerra de absolutos. México: Fondo de Cultura Económica. https://elibro.net/es/ereader/uoc/111069?page=99
Cita recomendada
CEVALLOS, María Rosa. Los territorios del cuerpo en disputa: aborto, estigma y ciberfeminismo. COMeIN [en línea], enero 2021, no. 106. ISSN: 1696-3296. DOI: https://doi.org/10.7238/c.n106.2106
Estudiante de doctorado en la UOC